Publicado por Jesusa Ricoy-Olariaga en su blog.
Amanecía mi día de hoy con un puñetazo en el estómago en forma de viñeta zafia, plantada en mi Iphone a través de una denuncia de la Asociación «El Parto es Nuestro». El dolor, la rabia y la incredulidad que he sentido son indescriptibles.