Soy nieta e hija de leche, y la historia se ha repetido en mi propia vida.
Las lágrimas se me caen… Nunca pensé que alguien como ustedes estarían interesadas en mi historia.
Y les agradezco mucho. Que esto sirva para otras madres, les dé fuerza y valor para continuar con la crianza de nuestros hijos con amor y ternura, y de la forma más sabia… Con nuestra leche materna.